Controversias
Cronológicas y Textuales

 

¿Cuántos años reinó Shaul?

Hay un pasaje en las Escrituras que tomado literalmente es imposible de interpretar, acerca del reinado de Shaul: 1Samuel 13:1, que dice así:


“Ben shanah Shaul b’moljo v’shtey shanim malaj ‛al Yisrael”

Literalmente se traduce de esta manera:

“Hijo de un año [era] Shaul y dos años reinó sobre Israel”

Es evidente que hay una omisión en el texto, o dos omisiones, relativas a los números. Obviamente, Shaul no tenía un año de edad cuando comenzó a reinar, por lo tanto el número que indica su edad está incompleto en el texto que nos ha llegado. Asimismo debe haber sucedido también con la cantidad de años que duró su reinado, porque todos los sucesos que acontecieron durante el mismo no pueden haber transcurrido en solamente dos años. Sin embargo, este solo texto es motivo de contienda entre judíos y cristianos, porque Saulo de Tarso atribuye a Shaul cuarenta años de reinado:

“Y entonces demandaron rey; y les dió Elohim a Saúl, hijo de Cis, varón de la tribu de Benjamín, por cuarenta años” – Hechos 13:21.

¿Por qué Saulo afirma tal cosa? Probablemente porque la interpretación rabínica de su tiempo así lo sostenía, o en principio lo calculaba en un número aproximado a cuarenta, cifra que en muchos casos se usa para indicar un periodo completo sin que corresponda exactamente al número real de años. Entonces examinemos las probabilidades según el relato completo de los hechos de Shaul:

1Samuel 9:1 Y había un varón de Benjamín, hombre valeroso, el cual se llamaba Cis, hijo de Abiel, hijo de Tzeror, hijo de Bejôrat, hijo de Aphiaj, hijo de un hombre de Benjamín. 2 Y tenía él un hijo que se llamaba Saúl, joven y bien parecido, que entre los hijos de Israel no había otro más hermoso que él; del hombro arriba sobrepujaba a cualquiera del pueblo. 15 Y un día antes que Saúl viniese, YHVH había revelado al oído de Samuel, diciendo: 16 Mañana a esta misma hora yo enviaré a ti un varón de la tierra de Benjamín, al cual ungirás por príncipe sobre mi pueblo Israel, y salvará mi pueblo de mano de los Filisteos: pues yo he mirado a mi pueblo, porque su clamor ha llegado hasta mí. 17 Y luego que Samuel vió a Saúl, YHVH le dijo: He aquí éste es el varón del cual te hablé; éste señoreará a mi pueblo.

La descripción que tenemos de Saúl cuando el Profeta Samuel lo ungió príncipe de Israel es la de un hombre joven, todavía bajo el techo de su padre. Entonces quizás podemos completar la primera parte del texto de la siguiente manera: “Hijo de [veinte y] un año [era] Shaul”, o cuanto mucho, “Hijo de [treinta y] un año [era] Shaul” – la expresión “hijo de … años” en hebreo significa “tenia … años”, por lo tanto, para traducir en manera más adecuada e igualmente correcta, podemos decir: “Tenía [veinte y] un años Shaul”, o si escogemos la segunda opción, “Tenía [treinta y] un años Shaul”.

La discrepancia mayor entre las dos opiniones –la judía y la cristiana– surge de la segunda parte del texto, ya que no hay ninguna objeción a que un rey haya reinado solamente dos años – pero en dos años no pueden suceder tantas cosas, como veremos, al menos treinta hechos sobresalientes:

1. Saúl ungido príncipe – 1Samuel 9:16; 10:1
2. Saúl presentado ante el pueblo – 1Samuel 10:23-25
3. Saúl derrota a los amonitas – 1Samuel 11:6-11
4. Saúl ungido rey – 1Samuel 11:12-15
5. Primer combate de Saúl y Yehonatan contra los filisteos – 1Samuel 13:2-14:46

No es simple establecer en qué tiempo sucedieron estos cinco primeros hechos. Aparentemente en un plazo corto o muy corto, de una semana, de acuerdo con dos pasajes que parecen implicar este término:

1Samuel 10:8 Y bajarás delante de mí a Gilgal; y luego descenderé yo a ti para sacrificar holocaustos, e inmolar víctimas pacíficas. Espera siete días, hasta que yo venga a ti, y te enseñe lo que has de hacer.
13:8 Y él esperó siete días, conforme al plazo que Samuel había dicho; pero Samuel no venía a Gilgal, y el pueblo se le desertaba.


Relacionando estos dos términos de siete días como referentes a un mismo periodo pareciera que hubiera pasado sólo una semana entre que Saúl es ungido príncipe y el primer combate contra los filisteos, pero hay elementos que indican que se trata de dos semanas distintas. En medio de estos dos pasajes encontramos el siguiente:

1Samuel 11:14 Mas Samuel dijo al pueblo: Venid, vamos a Gilgal para que renovemos allí el reino. 15 Y fué todo el pueblo a Gilgal, e invistieron allí a Saúl por rey delante de YHVH en Gilgal. Y sacrificaron allí víctimas pacíficas delante de YHVH; y alegráronse mucho allí Saúl y todos los de Israel.

Entonces, la primera semana establecida por Samuel para que Saúl lo esperara en Gilgal se completa entre el día en que Saúl es ungido príncipe (10:1) y el día en que es ungido rey (11:15), porque en ese momento Samuel volvió a encontrarse con Saúl en Gilgal como había sido indicado por el Profeta. Por lo tanto, la expresión “conforme al plazo que Samuel había dicho” en 13:8, que sucede en medio del combate contra los filisteos, debe tratarse de una semana distinta que ocurre en algún año sucesivo. Notemos que en 11:14 Samuel convoca al pueblo en Gilgal para “renovar el reino”, dando a entender que esta sería una ceremonia que se repetiría periódicamente, quizás anualmente.
Otro particular importante es que cuando Saúl es ungido entendemos que se trata de un hombre joven, incluso algunos lo menospreciaron (10:27), y en su primera batalla contra los filisteos ya está su hijo Yehonatan que es un combatiente formado. No podemos atribuirle a Saúl una edad inferior a cuarenta años en este episodio, considerando que Yehonatan conducía un ejército y tendría como poco veinte años, estimativamente.
Continuemos con la sucesión de hechos durante el reinado de Saúl:

6. Saúl combate contra los amalecitas – 1Samuel 15:1-9
7. Saúl es desechado como rey por su desobediencia – 1Samuel 15:10-31
8. Saúl llama a David a la corte – 1Samuel 16:19-22
9. Segundo combate de Saúl contra los filisteos / David y Goliath – 1Samuel 17:1-52

A partir de este suceso, la cronología de los hechos de Saúl debe ser sincronizada con la de los hechos de David.
Teniendo en cuenta que David tenía treinta años cuando comenzó a reinar (2Samuel 5:4) y que era un joven de menos de veinte años cuando mató a Goliath –pues no tenía edad como para ser considerado apto para la guerra– la siguiente sucesión de eventos tuvo lugar durante más de diez años.

10. Saúl nombra a David comandante de su ejército – 1Samuel 18:5
11. Saúl tiene celos de David – 1Samuel 18:7-9
12. Saúl nombra a David capitán de mil – 1Samuel 18:12-16
13. Saúl promete Merav a David – 1Samuel 18:17-19
14. Saúl le da Mikal a David – 1Samuel 18:20-22
15. Tercer combate contra los filisteos – 1Samuel 19:8
16. David huye de Saúl a Najoth – 1Samuel 19:22-23
17. David se refugia en Gath – 1Samuel 21:10
18. David se refugia en Adullam – 1Samuel 22:1
19. David se refugia en Mitzpeh de Moab y luego en Jereth – 1Samuel 22:3-5
20. Saúl mata a los kohanim de Nob – 1Samuel 22:11-21
21. David combate en Keilah; Saúl lo persigue – 1Samuel 23:1-13
22. David se refugia en Zif – 1Samuel 23:14-23
23. David se refugia en Ma’ón – 1Samuel 23:24-26
24. Saúl regresa para combatir contra los filisteos – 1Samuel 23:27-29
25. David se refugia en En-Ghedi / corta el manto de Saúl – 1Samuel 24:1-13
26. Muerte de Samuel – 1Samuel 25:1
27. David y Avigail – 1Samuel 25:2-44
28. Saúl persigue a David en Jakilah / David le perdona la vida por segunda vez – 1Samuel 26:1-25
29. David se refugia en Gath y habita en Tziklag al menos cuatro meses – 1Samuel 27:1-7
30. David combate varias batallas al servicio de los filisteos – 1Samuel 27:8-12
31. Cuarto y último combate de Saúl contra los filisteos / consulta a la adivina de Endor – 1Samuel 28:1-31:7

En esta última batalla mueren Saúl y tres de sus hijos.
Resumiendo, se registran al menos seis combates de Saúl contra distintos enemigos (filisteos, amonitas y amalecitas). Es de tener en cuenta que las batallas sólo se libraban durante una parte del año, como leemos en 2Samuel 11:1 “Y aconteció a la vuelta de un año, en el tiempo que salen los reyes a la guerra” y considerando los desplazamientos y el tiempo que se tarda en reorganizarse entre una batalla y otra, todos estos hechos no pueden haber sucedido en dos años. Además de los combates, Saúl también empleaba mucho tiempo en perseguir a David, que se refugió al menos en nueve lugares distintos, entre Judá, Moab y las ciudades de los filisteos. Todos estos movimientos llevan tiempo. Al menos por cuatro meses David estuvo entre los filisteos (27:7), aunque Akish declara que estuvo con él “estos años” (29:3). También anteriormente había estado un tiempo en Ma’ón, y allí tomó a Avigail como esposa, además de Ahinoam.
Por último, después de la muerte de Saúl fue puesto su hijo Ishboshet como rey, el cual tenía ya cuarenta años cuando comenzó a reinar (2Samuel 2:10), lo que hace totalmente imposible atribuir a Saúl un reinado de sólo dos años, puesto que era un joven cuando fue ungido rey, y su hijo ya tenía cuarenta años, siendo además uno de varios hijos, quizás el menor, puesto que no es nombrado entre aquellos que salieron a combatir.

En conclusión, en la segunda parte de 1Samuel 13:1 también debe faltar un término numérico, y la lectura podría ser “y [treinta y] dos años reinó sobre Israel” o “y [cuarenta y] dos años reinó sobre Israel”, siendo esta última preferible tomando en cuenta la edad de Ishboshet.
Tendríamos entonces la lectura probable de este pasaje de la siguiente manera:

“Tenía [veinte y] un años Shaul y [cuarenta y] dos años reinó sobre Israel”.

De ser así, los hechos de 1Samuel 13:2-14:46 podrían haber ocurrido alrededor del año vigésimo de su reinado, considerando que Yehonatan ya era un combatiente y habría nacido poco antes o poco después que Shaul comenzó a reinar.
Esta estimación que resulta en un total de 63 años no es del todo convincente considerando que tuvo al menos cuatro hijos y dos hijas, de los cuales tres fueron guerreros y uno de ellos le sucedió en el reino teniendo cuarenta años y no era el mayor, por lo cual sesenta y tres años serían pocos si su reino hubiera sido de 42 años y hubiera comenzado cuando él tenía 21, a menos que cuando asumió no fuera en realidad tan joven y tuviera ya hijos, aún cuando todavía estaba en casa de su padre. Por lo tanto, para mantener esta edad de 63 años la lectura de 1Samuel 13:1 podría ser como sigue:

“Tenía [treinta y] un años Shaul y [treinta y] dos años reinó sobre Israel”.

Sin embargo, tomando esta opción habría que considerar que Ishboshet no era el menor de los hijos, sino que podría ser el segundo (ya que el heredero al trono era Yehonatan y por lo tanto el primogénito) porque sería poco factible que Shaul a los 23 años ya tuviera al menos los cuatro hijos varones.
La deducción final es que el texto presenta dos lagunas relativas a los números de años, tanto de su edad como de su reinado.

No obstante, también existe la posibilidad de que el texto “y dos años reinó sobre Israel” sea correcto y no haya ninguna omisión, si consideramos que el escritor puede referirse al reinado de Shaul después de la muerte de Samuel, porque de hecho, mientras Samuel vivió siguió ejerciendo su judicatura, él convocaba al pueblo y legislaba, y el mismo Shaul estaba sometido al Profeta, por lo cual más que rey era un comandante militar. Sólo a partir de la muerte de Samuel fue Shaul la única autoridad y ejerció como rey a pleno título.



Yehoram de Israel y Yehoram de Judá

2Reyes 1:17 Y murió [Ochôzías] conforme a la palabra de YHVH que había hablado Elías; y reinó en su lugar Joram [Yehoram ben-Ajav], en el segundo año de Joram [Yehoram ben-Yehoshafat], hijo de Josaphat rey de Judá; porque Ochôzías no tenía hijo.
2Reyes 8:16 En el quinto año de Joram [Yehoram ben-Ajav] hijo de Achâb rey de Israel, y siendo Josaphat rey de Judá, comenzó a reinar Joram [Yehoram ben-Yehoshafat] hijo de Josaphat rey de Judá.

Aquí se nos presenta un problema: en 1:17 nos dice que Yehoram ben-Ajav comienza a reinar en Israel en el segundo año del reinado de Yehoram ben-Yehoshafat en Judá, y en 8:16 nos dice que Yehoram ben-Yehoshafat comienza a reinar en Judá en el quinto año del reinado de Yehoram ben-Ajav en Israel.

Desde la separación del Reino se sucedieron diecinueve reyes en Israel y diecinueve reyes en Judá – sin contar Athalia, que pertenecía a la casa reinante en Israel y usurpó el trono de Judá durante seis años. Los reyes de Judá pertenecieron a la Casa de David, mientras que sólo dos de los de Israel fueron ungidos: Yarov’am ben-Nevat y Yehu – los demás tomaron el reino violentamente, o lo heredaron. Solamente la Casa de Yehu permaneció más tiempo y tuvo cinco reyes. La dinastía anterior, de Omri, tuvo cuatro reyes y duró en total unos 46 años, más un reinado en Judá de la usurpadora Athalia. De los otros diez reyes de Israel sólo tres fueron sucedidos por sus hijos.
En los Libros de los Reyes se indica como referencia para el año de asunción de un rey de Judá el año de reinado del rey de Israel y viceversa. Sin embargo, sincronizar los reinados de ambas partes presenta algunas dificultades, porque había diferentes criterios en el modo de contar los años, y dos calendarios distintos.

Los dos criterios para contar los años de un reinado eran:
• Sistema de “exclusión del año de asunción”, por el cual el primer año un rey comenzaba a partir del Año Nuevo sucesivo a su ascenso, mientras que el periodo parcial en su año de asunción era computado como parte del reinado precedente.
• Sistema de “inclusión del año de asunción”, por el cual el primer año de un rey era el mismo en que había asumido, y al Año Nuevo sucesivo comenzaba su segundo año, aunque no hubiera transcurrido un año completo desde que asumió.

Con respecto a los dos calendarios, eran similares en cuanto a la duración del año y de los meses, que eran exactamente los mismos y coincidían en las fechas; la diferencia consistía en el inicio del año, que en el Reino de Judá era el 1 de Tishri, en otoño, y en el Reino de Israel era el 1 de Nisán, en primavera. Por este motivo, durante seis meses ambos reinos estaban en el mismo día de calendario pero con un año de diferencia.

En cuanto al sistema de cómputo de los años de reinado, en Israel se usó el de inclusión del año de asunción hasta Yehoash ben-Yehoajaz, y posteriormente se adoptó el sistema de exclusión.
En Judá se usó el de exclusión del año de asunción hasta el final del reinado de Yehoshafat, luego se adoptó el de inclusión, y se retornó al de exclusión a partir de Amatziah.
Un ejemplo del uso de estos criterios es el siguiente:
2Reyes 8:25 En el año doce de Joram hijo de Achâb rey de Israel, comenzó a reinar Ochôzías hijo de Joram rey de Judá.
2Reyes 9:29 En el undécimo año de Joram hijo de Achâb, comenzó a reinar Ochôzías sobre Judá.
En el primer caso se considera el sistema de inclusión usado en el Reino de Israel; en el segundo, el de exclusión usado en el Reino de Judá.

Así por ejemplo, durante el primer período, un rey de Judá que asumía entre Heshván y Elul, comenzaba a contar a partir del 1 de Tishri siguiente su primer año de reinado, ya sea que hubiera iniciado a reinar uno u once meses antes del Año Nuevo. Por otra parte, un rey de Israel que hubiera asumido en Adar, faltando un mes o días para el 1 de Nisán, contaba ese periodo como su primer año, y al Año Nuevo ya comenzaba su segundo año (ver ejemplos a continuación). De esta manera, podía darse el caso que en Judá un rey que asumió antes que otro rey en Israel comenzaría su “primer año” de reinado en el “segundo año” del de Israel, aunque de hecho hubiera iniciado a reinar antes que el rey de Israel.

En la siguiente tabla se indica el año según el calendario de Israel  y de Judá:

 

 

Israel: Año Nuevo en Nisán

 

Judá: Año Nuevo en Tishri


Nisan

Iyar

Sivan

Tamuz

Av

Elul

Tishri

Heshvan

Kislev

Tevet

Shevat

Adar

Nisan

Iyar

Sivan

Tamuz

Av

Elul

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


En el ejemplo a continuación vemos cómo un rey de Judá que hipotéticamente asumió en el mes de Nisán, comenzará su “primer año de reinado” después de un rey de Israel que haya asumido en Elul, cinco meses después del anterior.

Nisan

Iyar

Sivan

Tamuz

Av

Elul

Tishri

Heshvan

Kislev

Tevet

Shevat

Adar

Nisan

Iyar

Sivan

Tamuz

Av

Elul

 

 

 

 

 

Asunción Rey de Israel : Primer año de reinado

Segundo año de reinado

Asunción Rey de Judá

Primer año de reinado


En el ejemplo a continuación vemos cómo un rey de Judá que hipotéticamente asumió en el mes de Heshván, comenzará su “primer año de reinado” a mitad del “segundo año” de un rey de Israel que haya asumido en Adar, cuatro meses después del anterior.

Tishri

Heshvan

Kislev

Tevet

Shevat

Adar

Nisan

Iyar

Sivan

Tamuz

Av

Elul

Tishri

Heshvan

Kislev

Tevet

Shevat

Adar

 

 

 

 

 

§

Segundo año de reinado

 

Asunción Rey de Judá

Primer año de reinado

 

    § Asunción Rey de Israel : Primer año de reinado

 

A esta complicación se agrega el hecho que existieron también varias co-regencias, es decir, un rey en ejercicio nombraba rey subalterno a su hijo, y en estos casos el número de años de reinado atribuido al segundo puede variar si se incluyen o no los de co-regencia.
Además de esto, hay homonimias entre reyes contemporáneos, y reyes que tienen dos nombres.
Concerniente a los nombres, preferimos usar la transcripción del original hebreo, por lo tanto establezcamos las equivalencias en la siguiente tabla (sólo en relación a los reyes homónimos entre Israel y Judá):

Reina-Valera (1909) / LBLA

Transliteración del nombre hebreo

Joas / Joás, Jeoás

Yehoash

Joachâz / Joacaz

Yehoajaz

Joram

Yehoram

Ochôzías / Ocozías

Ajaziah

Entonces debemos distinguir entre los siguientes homónimos (Reyes de Judá / Reyes de Israel):

Yehoram, rey de Judá – Yehoram ben-Yehoshafat
Yehoram, rey de Israel – Yehoram ben-Ajav
Ajaziah, rey de Judá – Ajaziah ben-Yehoram – también llamado Yehoajaz ben-Yehoram
Ajaziah, rey de Israel – Ajaziah ben-Ajav

No contemplados en este estudio por pertenecer a un periodo posterior hay otros reyes homónimos:

Yehoash, rey de Judá – Yehoash ben-Ajaziah
Yehoash, rey de Israel – Yehoash ben-Yehoajaz
Yehoajaz, rey de Judá – Yehoajaz ben-Yoshiyahu
Yehoajaz, rey de Israel – Yehoajaz ben-Yehu

Entre las varias dificultades para entender correctamente la cronología, probablemente la más complicada es la que hemos presentado al principio, y citamos nuevamente los pasajes que nos interesa dilucidar:

2Reyes 1:17 Y murió [Ajaziah ben-Ajav] conforme a la palabra de YHVH que había hablado Elías; y reinó en su lugar Joram [Yehoram ben-Ajav], en el segundo año de Joram [Yehoram ben-Yehoshafat], hijo de Josaphat rey de Judá; porque Ochôzías [Ajaziah ben-Ajav] no tenía hijo.
2Reyes 8:16 En el quinto año de Joram [Yehoram ben-Ajav] hijo de Achâb rey de Israel, y siendo Josaphat rey de Judá, comenzó a reinar Joram [Yehoram ben-Yehoshafat] hijo de Josaphat rey de Judá.

Ahora bien, es necesario aportar otros datos para poder comprender mejor la cronología de estos reinados, y tomaremos como referencia a los dos Ajaziah, el hermano de Yehoram de Israel, que lo precedió, y el hijo de Yehoram de Judá, que lo sucedió:

1Reyes 22:51 Y Ochôzías [Ajaziah ben-Ajav] hijo de Achâb comenzó a reinar sobre Israel en Samaria, el año diecisiete de Josaphat rey de Judá; y reinó dos años sobre Israel.
2Reyes 8:24 Y durmió Joram [Yehoram ben-Yehoshafat] con sus padres, y fue sepultado con sus padres en la ciudad de David: y reinó en lugar suyo Ochôzías [Ajaziah ben-Yehoram], su hijo. 25 En el año doce de Joram [Yehoram ben-Ajav] hijo de Achâb rey de Israel, comenzó a reinar Ochôzías [Ajaziah ben-Yehoram] hijo de Joram [Yehoram ben-Yehoshafat] rey de Judá.

De acuerdo con estos datos podemos establecer un punto de referencia inequívoco: la muerte de Yehoram ben-Ajav de Israel y de Ajaziah ben-Yehoram de Judá ocurrió el mismo día por mano de Yehu (2Reyes 9:23-28). Ajaziah ben-Yehoram reinó sólo un año (2Reyes 8:26) y era sobrino de Yehoram ben-Ajav, que reinó doce años (2Reyes 3:1). Antes de Ajaziah ben-Yehoram había reinado Yehoram ben-Yehoshafat sobre Judá ocho años como rey único (2Reyes 8:17), y antes de Yehoram ben-Ajav había reinado Ajaziah ben-Ajav sobre Israel dos años (1Reyes 22:51), iniciando en el año diecisiete de Yehoshafat de Judá. En ese mismo año Yehoshafat había puesto a su hijo Yehoram como co-regente en el trono de Judá, porque él se había trasladado a Samaria (1Reyes 22:2).
De esta manera, se explica que cuando Yehoram ben-Ajav comenzó su reinado, dos años después de la muerte de Ajav, era el segundo año de Yehoram ben-Yehoshafat como co-regente, y posteriormente, cuando Yehoshafat abdicó en favor de su hijo Yehoram y este asumió como único rey de Judá, era el quinto año de Yehoram ben-Ajav en Israel.

En la tabla a continuación se muestran gráficamente los reinados de los reyes mencionados, a partir del año 17 de Yehoshafat. Como ya hemos explicado, estos se expresan en años de calendario y no según la fecha de asunción, por lo tanto el año inicial y final de cada rey está sombreado en parte, puesto que se cuentan como enteros aunque en realidad sean parciales. Por ejemplo, Ajaziah ben-Ajav comenzó a reinar en el año 17 de Yehoshafat (1Reyes 22:51) y reinó “dos años”, luego su sucesor Yehoram ben-Ajav comenzó a reinar el año 18 de Yehoshafat (2Reyes 3:1), lo cual nos indica que los “dos años” del reinado de Ajaziah se refieren a los que corresponden al 17 y 18 de Yehoshafat y no son dos años enteros, sino parte de dos años de calendario.

En 1Reyes 22:42 leemos que Yehoshafat reinó 25 años, pero ese periodo incluye los tres últimos años de Asa, en que Yehoshafat reinó como co-regente debido a la enfermedad de su padre, en cambio en 1Reyes 22:51 y 2Reyes 3:1 se cuenta desde que inició su reinado efectivo, y por este motivo en la tabla termina en su año 21 y no 25. (Ver: Cronología Completa de los Reyes de Israel y de Judá).



Ajaziah de Judá

El capítulo anterior nos introduce en otro conflicto narrativo, referente a la muerte de Ajaziah de Judá por mano de Yehu, Rey de Israel. Este hecho está registrado en el Libro de los Reyes y en el de las Crónicas en dos maneras distintas y aparentemente contradictorias:

2Reyes 8:29 Y el rey Joram se volvió a Jezreel, para curarse de las heridas que los Siros le hicieron delante de Ramoth, cuando peleó contra Hazael rey de Siria. Y descendió Ochôzías hijo de Joram rey de Judá, a visitar a Joram hijo de Achâb en Jezreel, porque estaba enfermo.
9:15 Habíase empero vuelto el rey Joram a Jezreel, para curarse de las heridas que los Siros le habían hecho, peleando contra Hazael rey de Siria.) Y Jehú dijo: Si es vuestra voluntad, ninguno escape de la ciudad, para ir a dar las nuevas en Jezreel. 16 Entonces Jehú cabalgó, y fuése a Jezreel, porque Joram estaba allí enfermo. También Ochôzías rey de Judá había descendido a visitar a Joram. 24 Mas Jehú flechó su arco, e hirió a Joram entre las espaldas, y la saeta salió por su corazón, y cayó en su carro. 27 Y viendo esto Ochôzías rey de Judá, huyó por el camino de la casa del huerto. Y siguiólo Jehú, diciendo: Herid también a éste en el carro. Y le hirieron a la subida de Gur, junto a Ibleam. Y él huyó a Megiddo, y murió allí. 28 Y sus siervos le llevaron en un carro a Jerusalem, y allá le sepultaron con sus padres, en su sepulcro en la ciudad de David.
10:12 Y levantóse de allí, y vino a Samaria; y llegando él en el camino a una casa de esquileo de pastores, 13 Halló allí a los hermanos de Ochôzías rey de Judá, y díjoles: ¿Quién sois vosotros? Y ellos dijeron: Somos hermanos de Ochôzías, y hemos venido a saludar a los hijos del rey, y a los hijos de la reina. 14 Entonces él dijo: Prendedlos vivos. Y después que los tomaron vivos, degolláronlos junto al pozo de la casa de esquileo, cuarenta y dos varones, sin dejar ninguno de ellos.

2Crónicas 22:6 Y se volvió para curarse en Jezreel de las heridas que le habían hecho en Rama, peleando con Hazael rey de Siria. Y descendió Azarías hijo de Joram, rey de Judá, a visitar a Joram hijo de Achâb, en Jezreel, porque allí estaba enfermo. 7 Esto empero venía de Elohim, para que Ochôzías fuese hollado viniendo a Joram: porque siendo venido, salió con Joram contra Jehú hijo de Nimsi, al cual YHVH había ungido para que talase la casa de Achâb. 8 Y fué que, haciendo juicio Jehú con la casa de Achâb, halló a los príncipes de Judá, y a los hijos de los hermanos de Ochôzías, que servían a Ochôzías, y matólos. 9 Y buscando a Ochôzías, el cual se había escondido en Samaria, tomáronlo, y trajéronlo a Jehú, y le mataron; y diéronle sepultura, porque dijeron: Es hijo de Josaphat, el cual buscó a YHVH de todo su corazón. Y la casa de Ochôzías no tenía fuerzas para poder retener el reino. 10 Entonces Athalía madre de Ochôzías, viendo que su hijo era muerto, levantóse y destruyó toda la simiente real de la casa de Judá.

En este capítulo no especificaremos, ya que se trata sólo de Ajaziah ben-Yehoram.
En el primer relato leemos que Ajazíah fue herido en el carro cerca de Ibleam (en el camino que va de Jezreel a Samaria) y murió en Megiddo. Luego sus siervos lo llevaron a Jerusalem y lo sepultaron allí.
En el segundo relato leemos que Ajazíah se había escondido en Samaria, lo tomaron y se lo llevaron a Yehu, y lo mataron. Luego fue sepultado dignamente por orden de Yehu.
Es ya difícil conciliar estos dos relatos, pero hay más elementos que complican la interpretación de todo lo relativo a este personaje:

2Reyes 8:17 De treinta y dos años era [Joram] cuando comenzó a reinar, y ocho años reinó en Jerusalem.
2Crónicas 21:5 Cuando [Joram] comenzó a reinar era de treinta y dos años, y reinó ocho años en Jerusalem. (cf. 21:20)

2Reyes 8:26 De veintidós años era Ochôzías cuando comenzó a reinar, y reinó un año en Jerusalem. El nombre de su madre fue Athalía hija de Omri rey de Israel.
2Crónicas 22:1 Y los moradores de Jerusalem hicieron rey en lugar suyo a Ochôzías su hijo menor: porque la tropa había venido con los Árabes al campo, había muerto a todos los mayores; por lo cual reinó Ochôzías, hijo de Joram rey de Judá. 2 Cuando Ochôzías comenzó a reinar era de cuarenta y dos años, y reinó un año en Jerusalem. El nombre de su madre fue Athalía, hija de Omri.

Ambos escritores confirman que Yehoram tenía 32 años cuando comenzó a reinar, y reinó ocho años, por lo tanto vivió 40 años.
Luego el escritor del Libro de los Reyes dice que su hijo Ajaziah tenía 22 años, mientras el de Crónicas dice que tenía 42 años – o sea que no sólo sería mayor que su propio padre, sino que además sería el menor de sus hijos!

Debido a estas incongruencias, se han formulado diversas hipótesis, pero ninguna de ellas es convincente. Tampoco presumimos de poder presentar alguna que sea indiscutible y definitiva, pero trataremos de dar una explicación que sea al menos admisible.
Veamos brevemente las interpretaciones que algunos han dado tratando de conciliar todos los relatos.

Con respecto a la edad:

• Los 42 años se refieren a los del reinado de la dinastía de Omri hasta ese momento, pero él tenía 22 años.
– Argumento débil, requiere forzar la interpretación del texto. La dinastía de Omri reinaba en Samaria, no en Jerusalem. Por otra parte, en cuanto concierne a herencia dinástica, no se tiene en cuenta la línea materna sino sólo la paterna.

• Cuando comenzó a reinar en Judá tenía 42 años y sería un hijo ilegítimo de Yehoshafat (porque Yehu lo llama “hijo de Yehoshafat”) que él habría tenido con Athalía cuando selló su alianza con Ajav (2Crónicas 18:1). Cuando Athalía se casó con Yehoram, quien sería hermano del supuesto Ajaziah por línea paterna, éste pasó a ser su hijo adoptivo, y así sería mayor que su padre adoptivo (siendo en realidad su medio-hermano). A los 22 años habría iniciado una co-regencia con Yehoshafat, es decir que cuando comenzó a reinar en solitario ya tenía 42 años, pero 20 años antes ya habría “comenzado a reinar”. A la muerte de Yehoshafat este supuesto Ajaziah habría logrado escapar de la matanza de sus hermanos (2Crónicas 21:4) y a la muerte de Yehoram habría vuelto a Jerusalem para tomar el reino.
– Argumento muy rebuscado, más bien inverosímil: ¿Cuántos compartirían el trono contemporáneamente? Yehoram fue co-regente con Yehoshafat durante cinco años; si este presunto Ajaziah fue co-regente desde los 22 años, habría estado en el trono ya siete años antes que Yehoram, y habría habido tres reyes de Judá durante los cinco años de co-regencia con Yehoshafat y Yehoram.

• Se trataría de dos personajes distintos: uno sería hijo de Yehoshafat y Athalía y tenía 42 años cuando asumió al trono; habría logrado escapar a la masacre de sus hermanos perpetrada por su medio-hermano Yehoram (2Crónicas 21:4), se habría refugiado en Samaria y a la muerte de Yehoram habría vuelto a Jerusalem para tomar el trono, conjuntamente con su sobrino/medio-hermano también llamado Ajaziah, que tenía 22 años cuando comenzó a reinar. Es decir, se trataría de dos hijos de Athalía con el mismo nombre, uno hijo ilegítimo de Yehoshafat y el otro, hijo de Yehoram.
– Este argumento aparentemente lograría resolver gran parte del conflicto textual, también con respecto a la manera en que fue muerto, pero es igualmente rebuscado y no proporciona pruebas convincentes. No hay indicios de un reino compartido, y si fuera así, ¿por qué ambos reyes irían a visitar al mismo a tiempo a Yehoram de Israel, dejando el trono de Judá vacante?

Con respecto a la secuencia de su muerte:

• Habría logrado huir de Jezreel y refugiarse en Samaria; luego los soldados de Yehu lo habrían encontrado; Yehu los habría mandado a que lo llevaran ante él (de regreso hacia Jezreel) en su propio carro, escoltándolo; llegando a Ibleam habría intentado escapar, siendo herido pero igualmente habría logrado llegar a Megiddo, donde muere. Luego Yehu daría la orden de que lo sepulten dignamente en Jerusalem porque es hijo de Yehoshafat.
– Argumento que evidentemente intenta de conciliar ambas narraciones, creando una secuencia poco probable.

• Se trataría de dos personajes distintos, como explicado anteriormente. El Ajaziah hijo de Yehoram habría sido el que fue herido en su carro y murió en Megiddo, el otro sería el hijo de Yehoshafat al cual habrían hallado escondido en Samaria y llevado ante Yehu para ser ajusticiado y sepultado.
– Como dicho anteriormente, es un argumento rebuscado para tratar de armonizar ambos relatos.

Descartamos las conjeturas anteriormente presentadas por su falta de consistencia y de verosimilitud. Analicemos entonces los puntos de convergencia y de divergencia entre ambas versiones.

Puntos de convergencia:

• Ajaziah es hijo de Athalía (2Reyes 8:26; 2Crónicas 22:2).
• Sucedió en el trono a su padre Yehoram ben-Yehoshafat (2Reyes 8:24; 2Crónicas 22:1).
• Reinó un año en Jerusalem (2Reyes 8:26; 2Crónicas 22:2).
• Fue a Jezreel visitar a Yehoram ben-Ajav, cuando éste había vuelto de su batalla en Ramoth (2Reyes 8:29; 9:15-16; 2Crónicas 22:6-7).

Puntos de divergencia:

1.
• Comenzó a reinar a los 22 años (2Reyes 8:26).
• Comenzó a reinar a los 42 años (2Crónicas 22:2).
2.
• Fue herido cerca de Ibleam, huyó a Megiddo y murió allí (2Reyes 9:27).
• Fue hallado en Samaria, llevado ante Yehu y ajusticiado (2Crónicas 22:9).

Considerando las coincidencias enumeradas, podemos afirmar que no se trata de dos personas distintas sino de un mismo Ajaziah en ambos relatos.
Intentemos entonces entender la dinámica de los hechos relativos a su muerte. En primer lugar tengamos en cuenta los factores geográficos, dónde se encuentran Jezreel, Ibleam, Megiddo y Samaria. Consideremos también que los escritores de Reyes y de Crónicas no relatan las secuencias en manera estrictamente cronológica, ni tampoco en detalle sino en manera sumaria. Además, había situaciones y puntos de vista diferentes entre los autores: el escritor del Libro de los Reyes tenía en cuenta tanto a Judá como a Israel, había sido testigo presencial del fin del Reino de Judá y estaba aún en la memoria de su pueblo el destino de sus hermanos del Reino de Israel, que habían sido llevados al exilio. El Cronista en cambio, sólo se interesa de Judá, pues la historia conocida de los Israelitas continúa sólo con el pueblo que a partir del regreso de Babilonia se comenzó a conocer como “Judío”, y escribió en una época ya lejana a los hechos narrados.

Aspecto geográfico: Jezreel y Megiddo están en el valle del Kishon; Ibleam está más al sur, en la conjunción de las rutas que van a Samaria de Jezreel y de Megiddo respectivamente, y Samaria está al sud-sudoeste de Jezreel y al sur de Megiddo. En 2Crónicas 22:9 la expresión “se había escondido en Samaria” es parentética (y así la expresan varias traducciones) y puede manifestar intención y no necesariamente hecho completado. De esta manera, es posible dar una interpretación verosímil de los hechos combinando ambas narraciones, como sigue:

Mas Jehú flechó su arco, e hirió a Joram entre las espaldas, y la saeta salió por su corazón, y cayó en su carro. Y viendo esto Ochôzías rey de Judá [el cual había de esconderse en Samaria], huyó por el camino de la casa del huerto. Y siguiólo Jehú, diciendo: Herid también a éste en el carro. Y le hirieron a la subida de Gur, junto a Ibleam. Y él huyó a Megiddo, y murió allí. Tomáronlo, y trajéronlo a Jehú, [porque] le mataron; y diéronle sepultura, porque dijeron: Es hijo de Josaphat, el cual buscó a YHVH de todo su corazón. Y sus siervos le llevaron en un carro a Jerusalem, y allá le sepultaron con sus padres, en su sepulcro en la ciudad de David.

Después de esto, Yehu fue a Samaria para liquidar al resto de la casa de Ajav, entre ellos los sobrinos de Ajaziah:

Y levantóse de allí, y vino a Samaria; y llegando él en el camino a una casa de esquileo de pastores, haciendo juicio Jehú con la casa de Achâb, halló a los príncipes de Judá, y a los hijos de los hermanos de Ochôzías, que servían a Ochôzías rey de Judá, y díjoles: ¿Quién sois vosotros? Y ellos dijeron: Somos hermanos de Ochôzías, y hemos venido a saludar a los hijos del rey, y a los hijos de la reina. Entonces él dijo: Prendedlos vivos. Y después que los tomaron vivos, degolláronlos junto al pozo de la casa de esquileo, cuarenta y dos varones, sin dejar ninguno de ellos.

De esta manera ambos relatos pueden concordar en una secuencia lógica: El encuentro entre Yehu, Yehoram y Ajaziah ocurre en Jezreel, donde Yehu mata a Yehoram. Ajaziah, huyendo hacia Samaria, es alcanzado por los soldados de Yehu en Ibleam y allí es herido, entonces cambia rumbo hacia el norte-noroeste (probablemente tratando de llegar a Tiro, donde reinaba la dinastía a la cual su abuela Jezabel pertenecía) pero los soldados de Yehu lo alcanzan en Megiddo y lo matan. Luego lo llevan (ya muerto) ante Yehu, que está todavía en Jezreel, y él ordena a los siervos de Ajaziah que le den una digna sepultura en Jerusalem porque era “hijo” (es decir, nieto) de Yehoshafat.
Yehu en este lapso está en Jezreel, porque debe terminar allí su trabajo eliminando a Jezabel. Sólo después de esto, él se dirige a Samaria (donde Ajaziah quiso esconderse, pero no llegó) para completar su obra de limpieza y acabar con toda la familia de Ajav.

El problema de la edad es mucho más complejo. Es ya difícil que un hombre de cuarenta años como Yehoram tuviera un hijo de veintidós años que fuera “menor” que sus hermanos (2Crónicas 22:1), lo que significa que Ajaziah nació cuando su padre tenía sólo dieciocho años… ¿A qué edad habría comenzado Yehoram a tener hijos?
El Cronista parece tomar como referencia el Libro de los Reyes, puesto que transmite casi literalmente ambos pasajes relativos al inicio del reinado de Yehoram y de Ajaziah (2Reyes 8:17 / 2Crónicas 21:5,20 y 2Reyes 8:26 / 2Crónicas 22:2) y la única diferencia es la edad atribuida a Ajaziah: 22 o 42 años. Siendo que estos números en todos los textos que hasta ahora conocemos están escritos con palabras y no con el valor numérico expresado en letras, no es posible atribuir la diferencia a error del copista. Sin embargo, sabemos que los escritores de los Libros de los Reyes y de las Crónicas usaron sistemas de escritura diferentes: antes del exilio se empleó el hebreo cananeo, y después del exilio se comenzó a escribir en hebreo babilonio, que es el actualmente en uso. Ambos sistemas coinciden en cuanto a fonemas –a cada letra corresponde sólo otra letra equivalente– y la transcripción entre uno y otro es exacta; así las Escrituras han sido copiadas letra por letra desde el hebreo cananeo al hebreo babilonio. Este último es el que empleó el escritor de Crónicas, pues ya estaba en uso en su tiempo el alefato que hoy conocemos. Aún así, es posible que en el texto original del Libro de los Reyes los números hayan sido expresados sólo con el valor numérico de las letras y no en palabras, y en este caso se puede conjeturar que el Cronista haya interpretado erróneamente un número al realizar la transcripción. Por otra parte, en la Peshitta no se registra esta discordancia, y también en 2Crónicas 22:2 dice 22 años cuando Ajaziah comenzó a reinar. Esto confirmaría la tesis de que la edad de 42 años en el texto hebreo sea un un error del copista.
Como hemos anticipado, no se pretende establecer esta interpretación como infalible, sino que la presentamos como posible.



¿Conflicto Profético?

Yehu fue el mejor de los Reyes de Israel, y el único que fue ungido proféticamente además de Yarovʹam. Sin embargo, en los comentarios cristianos siempre lo encontramos calificado como “malo” (igual que todos los Reyes de Israel), probablemente por lo que está escrito en 2Reyes 10:29 “Con todo eso Jehú no se apartó de los pecados de Jeroboam hijo de Nabat, que hizo pecar a Israel; a saber, de en pos de los becerros de oro que estaban en Beth-el y en Dan”. Entonces también deberían clasificar a casi todos sus pastores como “malos”, pues no se apartaron de los pecados de los padres de la iglesia, y siguen en pos de las fiestas paganas, el culto dominical y otras cosas que ellos instituyeron contra la Ley de Elohim, e hicieron abandonar a los creyentes los mandamientos, la Torah, el Shabat y las solemnidades del Señor – y muchos de ellos usurparon también el diezmo, que Elohim ordenó para los Levitas. Porque el culto que Yarovʹam había instituido en Israel era también de YHVH, sólo que no como Él lo había ordenado, sino que reemplazó el Arca de la Alianza con los becerros, los cuales en sí no cumplían la función de ídolos sino que eran imágenes a la manera de las de los querubines del Arca. Por lo tanto, Yehu hizo algo parecido a la Reforma Protestante, eliminó la idolatría y siguió adorando sólo al Eterno, pero en la modalidad que se había establecido en el Reino de Israel y no como Él lo había indicado. Lógicamente, había también razones políticas, porque el Templo estaba en Jerusalem, en el Reino de Judá, que en ese momento además era gobernado por Athalia, de la odiada dinastía de Omri que Yehu acababa de exterminar. Y de la usurpación de Athalia el responsable principal es Yehoshafat –siempre calificado como uno de los mejores Reyes de Judá–, porque él hizo alianza matrimonial con Ajav y de esta manera introdujo la descendencia de Jezabel en el linaje de David. Yehu fue también mejor que Salomón, ya que no permitió que se erigieran altares a los ídolos. A pesar de esto, hay dos Profetas que aparentemente enuncian juicios opuestos en relación a los hechos de Yehu: Elías y Oseas.

Elías – y Eliseo por mandato de Elías:

1Reyes 19:15 Y díjole YHVH: Ve, vuélvete por tu camino, por el desierto de Damasco: y llegarás, y ungirás a Hazael por rey de Siria; 16 Y a Jehú hijo de Nimshi, ungirás por rey sobre Israel; y a Eliseo hijo de Saphat, de Abel-Meholah, ungirás para que sea profeta en lugar de ti. 17 Y será, que el que escapare del cuchillo, de Hazael, Jehú lo matará; y el que escapare del cuchillo de Jehú, Eliseo lo matará.
2Reyes 9:1 Entonces el profeta Eliseo llamó a uno de los hijos de los profetas, y díjole: Ciñe tus lomos, y toma esta alcuza de aceite en tu mano, y ve a Ramoth de Galaad. 2 Y cuando llegares allá, verás allí a Jehú hijo de Josaphat hijo de Nimshi; y entrando, haz que se levante de entre sus hermanos, y mételo en la recámara. 3 Toma luego la alcuza de aceite, y derrámala sobre su cabeza, y di: Así dijo YHVH: Yo te he ungido por rey sobre Israel. Y abriendo la puerta, echa a huir, y no esperes.

2Reyes 9:36 Y él [Jehú] dijo: La palabra de Elohim es ésta, la cual él habló por mano de su siervo Elías Thishbita, diciendo: En la heredad de Jezreel comerán los perros las carnes de Jezabel.
10:10 Sabed ahora que de la palabra de YHVH que habló sobre la casa de Achâb, nada caerá en tierra: y que YHVH ha hecho lo que dijo por su siervo Elías. 16 Y díjole: Ven conmigo, y verás mi celo por YHVH. Pusiéronlo pues en su carro. 17 Y luego que hubo Jehú llegado a Samaria, mató a todos los que habían quedado de Achâb en Samaria, hasta extirparlos, conforme a la palabra de YHVH, que había hablado por Elías.
28 Así extinguió Jehú a Baal de Israel. 30 Y YHVH dijo a Jehú: Por cuanto has hecho bien ejecutando lo recto delante de mis ojos, e hiciste a la casa de Achâb conforme a todo lo que estaba en mi corazón, tus hijos se sentarán en el trono de Israel hasta la cuarta generación.

Oseas:

Oseas 1:4 Y díjole YHVH: Ponle por nombre Jezreel; porque de aquí a poco yo pediré cuenta de la sangre de Jezreel sobre la casa de Jehú, y haré cesar el reino de la casa de Israel. 5 Y acaecerá que en aquel día quebraré yo el arco de Israel en el valle de Jezreel.

En el primer relato leemos que el mismo Elohim ordenó el exterminio de toda la casa de Ajav, por medio del Profeta Elías, a través de Yehu, y que habiendo Yehu cumplido perfectamente con este mandato, el Señor le dice: «Por cuanto has hecho bien ejecutando lo recto delante de mis ojos, e hiciste a la casa de Achâb conforme a todo lo que estaba en mi corazón, tus hijos se sentarán en el trono de Israel hasta la cuarta generación».
En el segundo relato, sin embargo, Elohim reclama a la casa de Yehu “la sangre derramada en Jezreel”. Hemos leído en el artículo anterior que la matanza de Jezreel es la que Yehu llevó a cabo contra la casa de Ajav, según como Elohim había ordenado. Entonces, ¿por qué ahora demandaría a la descendencia de Yehú por algo que Yehú hizo en cumplimiento del mandato de Elohim?
Oseas anunció el fin del reino “de la casa de Israel”, no sólo de la casa de Yehu. Antes de que esto aconteciera, Elohim cumplió con Su palabra dada a Yehu, y cuatro generaciones de reyes descendientes de Yehu reinaron sobre Israel. Es necesario entender el contexto profético en el cual Oseas pronuncia esta sentencia, y es el ocultamiento de la casa de Israel por tiempo indeterminado, como permanece hasta hoy, separada de la casa de Judá. Entonces el juicio sobre la sangre derramada en Jezreel no tiene que ver con el exterminio de la dinastía de Ajav, que fue encomendado a Yehu de ejecutarlo en el Reino de Israel, lo cual él hizo magníficamente. Pero Yehu excedió en su celo por cumplir con este mandato, y mató también a Ajaziah, que era el rey de Judá. En la visión profética de Oseas, en la cual Judá “obtiene misericordia” (1:7), la casa de Judá reclama la sangre de su rey versada por Yehu en Jezreel, y considera que el mandato de exterminar la simiente de Ajav se limitaba al Reino de Israel solamente. La muerte de Ajaziah, el cual era de la casa de Ajav por línea materna, dió ocasión a Athalia para usurpar el trono de Judá e interrumpir el reinado de la casa de David por seis años. Quizás desde nuestro punto de vista Yehu habría hecho bien en ir también a Jerusalem y matar a Athalia como lo hizo con Jezabel, pero no estaba dentro de su mandato.
En conclusión, no hay conflicto profético: Elías y Eliseo pronuncian el juicio sobre la casa de Ajav en Israel, Yehu es el elegido para llevar a cumplimiento este juicio. Oseas anuncia que se reclamará el haber excedido en esta ejecución derramando sangre de la casa real de Judá.



¿Cuándo salió Abraham de Harán?

Según los datos que nos provee el Génesis en referencia a las edades de Abraham y de su padre Teraj, surge una aparente contradicción que observan tantos exegetas judíos como cristianos –aunque por motivos diferentes–.

Génesis 11:26 Y vivió Thare setenta años, y engendró a Abram, y a Nachôr, y a Harán. 32 Y fueron los días de Thare doscientos y cinco años; y murió Thare en Harán.
12:4 Fuése Abram, como YHVH le dijo; y fué con él Lot: y era Abram de edad de setenta y cinco años cuando salió de Harán. 5 Y tomó Abram a Sarai su mujer, y a Lot hijo de su hermano, y toda su hacienda que habían ganado, y las almas que habían adquirido en Harán, y salieron para ir a tierra de Canaán; y a tierra de Canaán llegaron.

Como se entiende del texto, Abram habría nacido cuando Teraj tenía setenta años de edad – suponiendo que Abraham fuera el mayor de los tres hijos mencionados, ya que este pasaje es similar a Génesis 5:32 “Y siendo Noé de quinientos años, engendró a Shem, Châm, y Japhet”, en el cual se nombran los tres hijos de Noé y aparentemente no por orden de nacimiento sino de importancia –por lo cual Abram podría haber nacido algunos años después en caso que Harán o Najor fueran mayores que él– y salió de Harán hacia Canaán a la edad de setenta y cinco años, es decir, cuando su padre tendría ciento cuarenta y cinco años de edad. El hecho de que en el texto se mencione la muerte de Teraj antes que la salida de Abram no genera conflicto, en cuanto no es necesario considerar que el relato indique una sucesión cronológica de ambos hechos, sino que simplemente da por terminado su breve resumen sobre la vida de Teraj para pasar a hablar de Abraham. Sin embargo, en un relato que ya hemos visto contiene otros errores (Ver: Notas), el texto afirma lo siguiente:

Hechos 7:4 Entonces salió de la tierra de los Caldeos, y habitó en Chârán: y de allí, muerto su padre, le traspasó a esta tierra, en la cual vosotros habitáis ahora.

Aquí Esteban afirma que Abram permaneció en Harán hasta la muerte de su padre, pero en Génesis 11:32 dice que Teraj vivió doscientos cinco años, lo cual presenta un problema matemático: si Abram nació cuando Teraj tenía setenta años, y sólo después de la muerte de su padre salió hacia Canaán, entonces él tendría ciento treinta y cinco años y no setenta y cinco. Para los exegetas judíos, a quienes no interesa defender la exposición de Esteban, el conflicto es moral: Abram no habría hecho bien en abandonar a su padre antes de que éste muriera, por lo tanto, sería lógico que se hubiese quedado con él mientras Teraj viviera. Se han propuesto varias tentativas de solucionar este dilema, por ejemplo, que en realidad Abram hubiera sido el hijo menor y que haya nacido cuando Teraj tenía ciento treinta años de edad, pero si hubiera sido así, no habría habido motivo para que Abram se considerara ya viejo para tener un hijo a la edad de cien años. Tampoco sería lógico que hubiera sesenta años de diferencia con su presunto hermano mayor.

Aparentemente, Abram sí esperó a la muerte de su padre para salir de Harán – por ese motivo se quedó en ese país aún después de haber recibido la orden de salir de su tierra y de su parentela, y el error está en el texto masorético que nos ha llegado hasta hoy, y serían correctos otros textos hebreos, entre ellos la Torah Shomronit (Pentateuco Samaritano) y las fuentes a las cuales tenían acceso los escribas de Qumran. También Filón de Alejandría afirma ambas cosas: que Avraham tenía 75 años de edad cuando salió de Harán, y que lo hizo después de la muerte de su padre. En la Torah Shomronit, Génesis 11:32 dice: “Y fueron los días de Thare ciento cuarenta y cinco años; y murió Thare en Harán”. De esta manera, Esteban habría dicho algo correcto, y también se disiparía el conflicto moral planteado por los rabinos.


 

 

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